Oh capitan!

El Intrépido lleva surcando los mares las tres últimas lunas. Recostado en la cubierta, Red otea el horizonte murmurando para sí: «condenadas medusas brillantes». Con su mano derecha sostiene sobre las aguas la botella que contiene el misterioso mensaje que inició esta aventura. Por un momento, Red tiene ganas de dejarla caer para que se hunda en el abismo, como todo lo que alguna vez ha poseído...

Has levado anclas en una gran travesía hacia lo desconocido para descubrir el origen de un misterioso mensaje en una botella. Pero una terrible tormenta ha hecho naufragar tu barco. Por suerte, una bestia marina, el Nukha, os ha rescatado a ti y a tus camaradas. Ahora, os refugiáis en su guarida. La cueva esconde varios objetos extraños. El capitán os ha dado su permiso para registrar el lugar y entregarle aquello que encontréis. Pero no vas a obedecer al pie de la letra. Tienes toda la intención de quedarte con la mejor parte del botín...

Oh Capitan es un juego de mesa asimétrico de roles cambiantes. Los jugadores que controlen al aventurero deberán de ofrecer las cartas de saqueo que robe al jugador que sea el capitán, diciendo lo que estas contienen pero sin necesidad de decir la verdad, de hecho, algunos objetos estarán malditos y no podrá hablarse de ellos

El capitán, quien está a salvo de ser atacado por los objetos, decidirá que miembros de la tripulación podrán mantener el saqueo o no y dichos miembros de la tripulación, podrán usar esos objetos contra otros aventureros.

De esta manera tendremos que saber cuando y como mentir, o decir la verdad, puesto que si pensamos que nos están mintiendo, podremos ganar una moneda apostando sobre la veracidad de lo que nos dicen.

En cualquier momento se podrá reclamar el puesto de capitán, siempre que seamos el jugador que más monedas tiene y al final de la partida, el jugador con más monedas, será el ganador de la misma.

Un juego rápido de faroleo en el que la clave estará en saber cuando engañar o saber cuando nos están engañando, hacernos acopio de los objetos buenos y así utilizarlos contra nuestros compañeros.